martes, 23 de septiembre de 2008

Ten Thousand Days

Mientras escucho y veo un recital de Tool me entero, por boca de mi amigo Leandro, de que el nombre de 10.000 Days viene de la cantidad de días que la madre de Manyard (el cantante de la banda que sirvió de excusa a Cristian Castro para tatuarse una pinchila/pitulín en la espalda) sufrió de cáncer. El caso me toca de cerca. Pienso en mi papá, tipo con el que siempre mantuve FUERTES diferencias. Hace un par de meses le quitaron un tumor del estómago. Pienso en cómo me afectó su enfermedad. Pienso en los cuentos pseudo alegóricos que le escribí (todos en papel y que probablemente nunca los muestre por aquello del pudor). Pienso en una conversación con Martín. Pienso en un montón de momentos, me acuerdo de algún que otro mal trago, de algún que otro buen trago con Kike, que dicho sea de paso fueron muchos. Pienso en una "banda" de cosas. Pienso en que uno generalmente se pone en el papel de ofendido, a veces con razón otras, sin ella.
Se me cruza por la sesera qué hubiera pasado si todo eso de la operación no hubiese tenido un buen resultado. Qué estaría escribiendo hoy. Pienso en mis depresiones, indudablemente hubieran vuelto para Maipú al 1.. 5to B.
Pienso en el cáncer. ¿Cuánta gente se lleva por día? ¿Cuántos parientes, amigos, parientes de amigos se fueron por ahí? ¿Cuánta gente que yo admiro, quiero, o simplemente conozco pasó pal otro lado por eso (tres tíos, Richad Wright, Zappa, padres de amigos, etc, etc.)?
Pero vuelve (y, lógicamente, es lo que más me afecta) la enfermedad de mi viejo. Mi relación con él. Las peleas eternas. Mis acusaciones: las justificadas, las sin fundamento.
Es muy raro pensar en cómo hoy todavía, después de cinco meses de la primera operación, no terminamos de arreglarnos. Uno tiene rastros de culpa por esas cosas. A uno le ataca un poco el arrepentimiento.
Capaz en algunos días, espero que no sean esos diez mil, la relación se mejore. Capaz tengamos tiempo de sentarnos y compartir lo que hace falta. Capaz viene siendo hora de que vaya borrando recelos y solucione odios. En síntesis, capaz vaya siendo hora de crecer un poco y tratar de entenderlo, darle un abrazo y decirle lo que nunca le dije...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

que pasa si un post tuyo me llega a emocionar tanto que me deja llorando un rato despues de haberlo leido? eso es lo que me produjo este y por eso, me encanto. ojala este ese abrazo y ojala no sea en 10.000 dias. ojala haya muchos abrazos, ojala haya 10.000 dias.

luli dijo...

y una que creía que te conocía y me vengo a encontrar con que me metés semejante piña en la “geta”.
me acuerdo. la noche antes que muriera entré en su habitación a buscar algo que ya no me acuerdo. lo desperté al encender la luz y giro su cabeza hasta que sus ojos me encontraron.. ignorante, le dije soy yo y me acerque para darle un beso en la frente. no miento cuando digo que todavía mantengo la sensación en los labios, el olor de su pelo, su mirada, tan roja, cansada y definitiva como la que tengo hoy.
hay un tema de fito que siempre me pareció una boludez hasta ahora. nos queda toda la vida por hacer, somos adultos... me entiende amigo, no? y sin embargo, cada vez que lo escucho, reelaboro la letra y le canto, sin garganta.
llevo tus marcas en mi piel Manuel y, hoy, sólo te quiero ver!
a veces dan ganas de romperse la cabeza contra el respaldar de la cama y es que estamos tan tristes.
humor!
siempre dispuesta a compartir una juntada y un alcohol, degustando de su musiquita con amigos. dos besos y un abrazo.